SEIPASA participa en un proyecto europeo sobre la producción de fruta de hueso sin residuos

SEIPASA participa en un proyecto LIFE+ para la mejora de la calidad y sostenibilidad de la producción, conservación, procesado y comercialización de la FRUTA DE HUESO. En este ambicioso proyecto, cofinanciado por la Unión Europea con un presupuesto total de más de 3 millones de euros, SEIPASA trabaja con un partenariado nacional e internacional, entre los que se encuentran universidades, centros de investigación y empresas privadas. El trabajo de SEIPASA se centra en la aplicación de su Sistema global R-Free® durante la fase de producción.

Frente a la falta de alternativas en la PRODUCCIÓN SIN RESIDUOS DE FRUTA DE HUESO, la Unión Europa ha dado luz verde al proyecto LIFE+ (LIFE12 ENV/ES/000902), “Zero Residues: towards a sustainable production and supply chain for stone fruit”, cuyo objetivo es la promoción de sistemas alternativos en la producción de este tipo de fruta, así como en su conservación tras la cosecha, promoción en los supermercados y elaboración de productos derivados.

Esta apuesta por la producción sin residuos ha irrumpido con fuerza en el norte de Europa como una corriente global, que demanda una producción agrícola más saludable. Este hecho, unido a los recientes escándalos alimentarios, ha incrementado la sensibilidad de los consumidores que exigen productos de calidad, sanos y sin pesticidas, y que además sean respetuosos con el medio ambiente y los animales. Los supermercados han reaccionado a estas demandas, reclamando a los proveedores adoptar métodos de producción más sostenibles.

De hecho, en Europa los esfuerzos en esta dirección se han centrado en el cultivo de vegetales. Así, la producción de verduras y hortalizas bajo los criterios de minimización de residuos está bastante extendida, implantada y demandada en los supermercados de los países nórdicos. En cambio esto no sucede de igual modo con la fruta, especialmente de hueso, dado que la fruticultura conlleva ciclos vegetativos y manejos asociados que imponen dificultades añadidas. Ejemplo de dichas dificultades cabe destacar que los pesticidas permanecen más tiempo adheridos al tejido celular del árbol frutal y que no existen suficientes estudios relativos a su degradación.

Además la fruta es más sensible a impactos durante el transporte y son alimentos mucho más perecederos: cualquier golpe o imperfección resulta vital desde el punto de vista fitosanitario, ya que hay muchas enfermedades que siguen afectando a las frutas de hueso una vez cosechadas. Es por esto que se aplican un sinfín de tratamientos químicos denominados “de postcosecha”, con el objetivo de asegurar su conservación hasta la llegada al consumidor. Teniendo en cuenta todos estos hándicaps, hasta el momento apenas se ha invertido en la investigación de la producción de fruta de hueso sin residuos(...).

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